En verano, a nuestros peques les encanta pasar tiempo en el jardín. Para que el juego al aire libre les resulte aún más agradable y lleno de sensaciones, merece la pena invertir en un parque infantil doméstico. Hoy os contamos cómo hacerlo y cuánto cuesta esta inversión.

Designa un lugar seguro

El espacio de juegos de los niños debe encontrarse en un lugar alejado de las potenciales fuentes de peligro, como por ejemplo de estanques y aparatos eléctricos (cortacésped, sierra), así como de la entrada a la propiedad. Recomendamos encontrar un rincón en el jardín que se vea desde la terraza o desde la ventana de la cocina o el salón.

Suelo

El parque puede encontrarse sobre la hierba, que es segura para los pequeños y amortigua bien las posibles caídas. Otra idea es invertir en un suelo especial de placas de goma, que se caracterizan por unas maravillosas propiedades físicas y resisten a las condiciones atmosféricas. Un metro cuadrado de esta superficie cuesta unos 25 €.

Casita para los niños

En el parque no puede faltar una casita para los niños. Al fin y al cabo, será su base principal y su escondite. Además, les protegerá del sol abrasador o de la lluvia que los pueda coger desprevenidos. La casita puede estar equipada con escaleras y un tobogán que garantice una diversión sin igual. Por 250 € más o menos ya puedes comprar una casita construida.

Arenero

A todos los niños les encanta jugar en la arena. Por lo tanto, tu parque doméstico no estará completo sin un arenero. Solo tienes que fabricar una caja del tamaño adecuado y echar arena pura (un saco de 20 kg de arena certificada cuesta unos 20 €). También recomendamos que el arenero tenga protección contra la lluvia o la entrada de intrusos, por ejemplo animales, que puedan dejar sus heces en ella. Así pues, puedes fabricar una cubierta de madera o equipar el arenero con una lona impermeable que permita cubrirlo cuando acaben los juegos.

Parque de escalada

Un parque de escalada puede suponer una atracción maravillosa para los niños, quienes lo pasarán como los indios trepando las cuerdas y las barras. De este modo, desarrollarán su coordinación motora y reforzarán su sensación de autoestima y seguridad en sí mismos. También puedes invertir en una pared de escalada para niños, que seguro que será la principal atracción del parque. Una pared como estas cuesta unos 250 €.

Piscina de jardín

En verano, también recomendamos garantizar a los niños un poco de refresco. Las piscinas de jardín vendrán de lujo para entretener a los niños y refrescarlos incluso en las tardes más calurosas. Por 50-70 € puedes adquirir una piscina de estas. Si no tienes sitio suficiente para meter la piscina, siempre puedes comprarles a los críos una cortina de agua. No es más que una estructura vertical con un sistema de aspersión. Un aparato así se puede comprar desde 20 €.

Diseñar un parque en casa supone una inversión tan práctica como costosa, ya que puede salirte por varios cientos de euros. Si te faltan fondos para comprar los elementos imprescindibles del parque, puedes recurrir a los créditos de 300 euros para financiar la inversión. Devolverás el préstamo en un plazo conveniente mientras los niños lo pasan en grande en un verano inolvidable.