Aragón es una Comunidad Autónoma del noreste de España, constituida por las provincias de Zaragoza, Huesca y Teruel. Aragón tiene una población de 1.186.849 habitantes con una extensión de 47.669 km2.

La capital de Aragón es Zaragoza. Limita con Francia, Navarra, La Rioja, Soria, Guadalajara, Cuenca, Valencia, Castellón, Tarragona y Lleida.

En el Norte se encuentran los Pirineos (monte Aneto, Monte Perdido, Maladeta), con valles como los de Ansó, Hecho, Canfranc, Ordesa, Benasque, etc. En el centro se extiende la depresión del Ebro, y en el Oeste y Sur destacan alineaciones montañosas que forman parte del sistema Ibérico (Moncayo, sierras de Algairén, Gúdar, Montes Universales, Albarracín, etc).

La cuenca del Ebro es el eje de toda la región, salvo la zona Sur de Teruel, cuyas aguas van al Tajo, al Turia y al Mijares. El clima es mediterráneo de interior, con inviernos fríos y veranos calurosos. Las precipitaciones son escasas e irregulares, excepto en la zona pirenaica. Su economía se basa en la agricultura y la ganadería. Importante industria. Yacimientos de lignito y hierro en Teruel y gas natural en Huesca. Turismo de invierno con centro en Java.

Historia de Aragón

Durante la dominación romana Aragón formó parte de la provincia Tarraconense, aunque le romanización, a excepción de Caesaraugusta (Zaragona), fue poco patente. Los visigodos la conquistaron en el siglo V, y los árabes, en el VIII. Fue condado independiente desde el siglo IX, incorporado al reino de Navarra en el 925.

A la muerte de Sancho III, en 1035, se constituyó en reino, y en 1137 se llevó a cabo la unión del reino de Aragón, y el condado de Barcelona, formándose así la Corona de Aragón, definitivamente unido a Castilla con el matrimonio del rey Fernando con Isabel de Castilla. Sus fueros especiales fueron la causa del conflicto del pueblo de Zaragoza con Felipe II por la cuestión del juicio a Antonio Pérez. En la guerra de Sucesión, Aragón apoyó al archiduque Carlos de Austria en contra de Felipe V.

Tras la batalla de Almansa (1707), el rey borbónico suprimió los fueros y privilegios aragoneses. La guerra de la independencia repercutió en la economía y demografía aragonesas, igual que las guerras carlistas y la güera Civil (1936-39).

Durante esta última, muchas zonas rurales permanecieron fieles a la república, mientras que Zaragoza se integraba en el bando franquista. Restablecida la democracia, en 1978, Aragón logró un régimen preatonómico y en agosto de 1982 se hizo efectivo el estatuto de autonomía. Las elecciones autonómicas de 1983 registraron un triunfo del PSOE, partido que perdió su mayoría absoluta en 1987. En 1991 venció la coalición formada por el Partido Aragonés Regionalista y el Partido Popular. Tras una moción de censura socialista, con el apoyo de Izquierda Unida, en 1993 volvió a ocupar la presidencia el PSOE. Sin embargo, tras los comicios de 1995 y el PP la presidencia.

En 1999 el pacto entre PSOE y PAR llevó a la presidencia de la Comunidad al socialista Marcelino Iglesias, revalidado en 2003. En junio de 2006 se aprobó la reforma del Estatuto.